El impulsor de Yaqua, primera empresa social en su tipo, ofreció la conferencia El emprendimiento con responsabilidad como parte de las actividades en la semana de voluntariado universitario UDEP (UNIVAS).
Por Ioanna Gallo. 04 noviembre, 2015.
Yaqua es una iniciativa que busca “transformar el consumo de agua embotellada en una corriente de cambio y solidaridad”, según explica Fernando Tamayo, quien considera que la falta de acceso al agua potable es una de las injusticias más grandes en el mundo. Ante ese problema, hace unos años, Tamayo decidió emprender en una empresa cuyas ganancias se destinen al 100 % a implementar proyectos sociales, sostenibles en el tiempo, que ayuden a resolver los problemas de satisfacción de necesidades básicas en las zonas más vulnerables del país.
“En el Perú hay 8 millones de personas que no tienen acceso a agua potable, 10 mil niños al año mueren por tomar agua contaminada. Esta es una realidad absurda completamente contradictoria al crecimiento que hemos tenido como país”, explica Tamayo, quien además compara que “en el 2000 se vendieron 6 millones de litros de agua embotellada frente a los 8 millones de peruanos sin agua. En el 2014 se vendieron 650 millones de litros de agua embotellada y el número de peruanos sin agua no ha variado.”
Tamayo agrega que Yaqua es la primera “empresa social”, en su tipo y en la región. “Como este concepto de empresa social no existe en el Perú, para registrarla hicimos una mistura de modelos que ya existen, que son la asociación civil (ONG) y la empresa privada (SAC). Las hemos acomodado para poder ser una empresa social que destina el 100 % de sus ganancias a iniciativas de manera legal.”
Esta empresa social financia dos tipos de proyectos: implementar sistemas de agua en la zona de la sierra y, en la selva, procesar el agua disponible para que sea apta para consumo humano. “A cada casa de una zona de la sierra donde no entran empresas de agua potable, lo que hacemos es captar algún manantial y lo conectamos con tubos en reservorio. Luego, a cada casa le damos un caño y un lavadero de cemento. En la selva donde tienen el río al costado, limpiamos y filtramos el agua de minerales pesados y excremento.”
Durante su presentación en la Semana UNIVAS, Fernando Tamayo invitó a los alumnos a generar iniciativas de impacto social, confiar en sí mismos e inspirarse en los demás para lograr sus objetivos: “confíen en sí mismos y encuentren ese propósito de vida que les mueve. Si la cólera prende la chispa para actuar, es el amor el que hace que nuestras buenas acciones se expandan.”